lunes, 13 de noviembre de 2017

Con cajas y a lo loco

¡Hola a todos! ¡Qué frío hace! Yo encantada, oye, que no aguanto el calor, pero podría haber venido poco a poco, que ha llegado sin avisar. Aunque aquí ya estamos acostumbrados a los cambios bruscos. Esta semana estaré bastante ocupada: el fin de semana tengo un curso, me han planteado un encargo nuevo -un libro sensorial infantil, estoy esperando la confirmación oficial para comprar materiales o dejarlo a un lado- y por fin he podido terminar el diseño de tres de las cuatro agendas que me han pedido, así que, en cuanto las imprima esta tarde, empezaré la encuadernación. 

Desde hoy tenéis a vuestra disposición un diccionario con términos relacionados con lo que hago. Aunque es la entrada anterior a esta, para encontrarla rápidamente sólo tenéis que pinchar sobre el señor con gafas que veis a la izquierda. Poco a poco iré subiendo más definiciones. Por ahora he puesto lo básico. 

Hoy os traigo un trabajo ya antiguo, lo hice antes del verano durante el curso. ¡Es mi primera caja! Es muy sencilla, como podréis ver, pero con estás técnica se pueden hacer maravillas. Si vierais las de mi compañero Jose... Se ha pasado todo el verano diseñando cajas, a cada cual más bonita. Yo tengo planteado hacer una pequeña de música, pero es un proyecto que por ahora tengo aparcado. 

Para hacer la caja necesité mucho cartón, tela, en este caso verde, y papel. No tenía ni idea de como iba a quedar, así que elegí un papel básico para no derrochar los decorados. Se trata de una caja a medida para conservar un libro, así que necesitamos también el libro que queramos conservar. Puede ser también un cuaderno o cualquier otra cosa. Una compañera hizo una pequeñita para una baraja de cartas antigua que tiene, le quedó genial. 

Sin más, os dejo con las fotos: 

Forrada en tela verde, salvo el "corte"

También el exterior

Ignorad la tarta y fijaos en la caja, XD. Como podéis ver, el libro encaja perfectamente y queda bien protegido, así que es ideal para conservar esos libros antiguos que tengáis por casa o aquellos a los que tengáis un cariño especial. 

Fotos realizadas en la Heladería Vintage, a pocos pasos de Plaza de Armas (Sevilla). Sólo el escaparate ya llama la atención y doy fe de que las tartas están buenísimas. 

Hasta aquí el post de hoy, cuando tenga tiempo haré alguna caja más bonita y os la enseñaré con más detalle. =)

¡Nos vemos pronto!

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