sábado, 4 de mayo de 2019

Separadores bien hechos...

¡Hola a todos! ¿Qué vais a hacer este sábado? Yo pasarlo en el pueblo, estudiar y decidirme entre poner la piscina o pasarme la tarde metida en la casa, que hace mucha calor. En estos días estoy trabajando en un libro de fieltro con juegos completamente nuevos, nada que ver con lo que ya había hecho antes; me gustaría hacerle unos cuadernos a una niñas a las que quiero mucho y tengo pendiente hacer varias libretas de Harry Potter, así que poco a poco tendré bastante variedad para seguir actualizando el blog. Mientras, os dejo los pocos post que aún me quedan:

Iba a subiros esta entrada ayer pero entre una cosa y otra lo fui dejando así que aquí la tenéis: un cuaderno encuadernado con la cinch y con separadores hechos con una herramienta especializada. Si recordáis, hace unos meses le hice a mi madre un cuaderno de cuentas con separadores, pero hice las pestañas a mano y claro, no quedaron muy así. Sabía que había una herramienta para hacerlas bien hechas, todas iguales y con una forma bonita y en cuanto pude me la compré; es perfecta para hacer cuadernos para clase, planificadores, cuadernos de receta o agendas, pero aún no la he usado para nada de eso. La he estrenado ya, pero para este cuaderno. 

Estrella es una buena amiga mía que me ha pedido ya varias cositas para regalar a sus seres queridos y además me hace publicidad entre sus conocidos. (Muchas gracias nena). Este trabajo me lo pidió su jefa, que quería un cuaderno en tamaño A5, con los mismos papeles que usé para el de mi madre como separadores (de la colección Alchemy de Stamperia) y con las páginas en blanco. 

En ese momento no tenía folios en ese tamaño, me los cortan en mi papelería de confianza pero estaba cerrado así que los corté yo misma con mi cizalla. Usé cincuenta folios A4 color crema, que al cortarlos por la mitad se convirtieron en 100 folios tamaño A5. Los separé en grupos de veinte, para tener el cuaderno dividido en cinco secciones, con cuatro separadores. 

El proceso de cortar los folios es bastante aburrido pero en contra de lo que creía, fue bastante rápido. Una vez los tenía listos, había que continuar con los separadores. Para cortarlos usé de referencia una de las páginas del cuaderno: misma altura y mismo ancho más el tamaño de la pestaña. Tras cortarlo todo, lo siguiente fue aprender a usar la herramienta de las pestañas. No quería destrozar los papeles de los separadores, así que hice pruebas en una cartulina vieja y tras varios intentos aprendí mas o menos como deben quedar las medidas y a qué altura hay que poner las pestañas. Ya tenía listos los separadores. 

Una vez listo el cuerpo del cuaderno, hice las tapas: la delantera con papeles de la misma colección -en ambas caras- y la trasera con tela de encuadernación en burdeos y papel en la cara interior. 

Para finalizar, encuaderné el trabajo con mi cinch, a la que por cierto, también le debo un post -si abro algún día la sección de Encuadernación y scrapbooking-. Elegí las anillas en oro rosa, son ideales para colecciones de este estilo. 

Os enseño las fotos, con todos los separadores y detalles:
















¿Cómo lo veis? Los separadores quedan genial con esta herramienta ¿verdad? Y todos los colores combinan muy bien con las anillas y la tela de encuadernación de la tapa trasera =) Sé que a la jefa de Estrella le ha encantado y estoy deseando hacerme uno para mí pero con otra colección. La de Alicia, ¿quizás? ¿O algo veraniego? Ya os contaré. Espero que os haya gustado este trabajo, pasad un buen fin de semana, ¡nos vemos pronto!

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