¡Hola a todos! Hoy es uno de esos días que parece que va a hacer frío, está lloviendo pero sales a la calle y te da todo el bochorno de golpe y es como "Dios, en verano vamos a morir todos". Tenía cita en la esteticien pero he tenido que cambiarla para mañana así que aprovecho el ratito y subo el post que tenía que haber subido ayer. ¿Os acordáis del primer cuaderno que me pidieron? Imagino que no, porque ha pasado ya más de un año de aquello, ¡cómo pasa el tiempo! Todavía me acuerdo del primer día del curso que estábamos mi amiga Ana y yo con caras de ¿? y ahora las dos no paramos de encuadernar. Bueno, vamos al lío.
Cristina fue la primera amiga que confió en mí y mis -por aquel entonces nulas- habilidades como encuadernadora. En su momento me pidió un cuaderno rojo, pero rojo, rojo, rojo y con Alicia de protagonista. Podéis verlo AQUÍ. Y como es una niña eterna, en cuanto vio el papel de Peter Pan le pasó como a Belén y me dijo que quería algo. No sabía qué, pero algo.
Unos días después hablamos y me comentó que quería un cuaderno para usarlo de diario y que el color le daba igual y fue ahí cuando se me encendió la bombilla. Todavía no he encontrado cierres de diario -si sabéis dónde puedo comprarlos avisad, porfa- así que opté por la opción que conocía del curso: la encuadernación con solapa.
Ya empecé una el año pasado, pero aún no la he terminado, así que esta es en realidad mi primera encuadernación con solapa. Además, se trata de unas tapas con un cierre muy distinto a lo que empecé en su día. El resultado, en mi opinión, es perfecto. Un fondo sencillo, con un color muy llamativo y un cierre único con un precioso botón que adquirí en la mercería de la Plaza de las Monjas (Huelva) y un trocito de goma elástica. Creo que queda mucho más bonito que el sencillo cierre con elástico y no necesita más adorno que el botón. (Aunque el cierre básico con elástico también queda muy bonito si se combina con números o letras de madera). Cualquiera puede abrirlo, sí, pero da esa sensación de seguridad de los diarios.
El interior del cuaderno es sencillo. Usé folios beige, mis favoritos, y los cosí en el telar sobre dos cuerdas, cómo hago siempre que el cuaderno no lleva impresión. Para el lomo utilicé cinta de cabezada prefabricada en color blanco y cinta de registro negra (un día os tengo que contar de dónde saco tantas cintas de registro). Las hojas de guarda, como ya he dicho, son las del bonito papel de Peter Pan. Pasemos a lo más interesante y llamativo de este cuaderno, la solapa:
Nunca había hecho algo así ni tampoco busqué tutoriales, sólo me puse a crear a ver qué salía. Primero hice un orificio para el botón -tras tomar las medidas- y con ayuda del punzón lo fui agrandando hasta que cabía la parte inferior del botón (¿eso tiene nombre?). Lo pegué con silicona -hice tres intentos porque no terminaba de pegar pero al final se quedó- y lo dejé secar. Después tomé más medidas, hice otro orificio en la solapa y pasé, de fuera a dentro, los dos extremos del elástico con ayuda de una aguja. Hice un nudo doble y pegué los extremos a la parte interior de la solapa. el único punto débil de este proceso es que al ser cuerda- aunque muy fina- se nota el grosor a través del papel de guardas, pero no es algo que me moleste o quede feo.
Todo esto que os estaré contando os sonará a chino así que os dejo con las fotos para que lo veáis mejor. A ver qué os parece.
En la tapa trasera añadí un recorte del papel con una de las frases más conocidas de Peter Pan.
¿Qué opináis? ¿Os gusta el botón? Me pareció precioso y aunque compré otros dos más al final me decidí por ese para este cuaderno, creo que el azul marino y el dorado ayudan a combinar el naranja de la tela con los tonos del papel. ¿Qué pensáis del naranja? Muy llamativo, ¿verdad? Ya era hora de cambiar un poco, que siempre uso tonos oscuros. Lo mismo me animo y pruebo también con un amarillo, a ver qué sale.
Yo estoy muy contenta con el resultado, tanto que al día siguiente de terminar este ya estaba haciendo una libreta con solapa y otro de los botones que compré. Os lo enseño en unos días. Ah y tras mostrarlo por redes sociales me han pedido varios, parece que ha triunfado. =D
Aquí tenéis a Cristina enamorada de su cuaderno. Y es que menudo cambio entre este y el de Alicia. Muchas gracias reina por seguir confiando en mí. ^_^
Pasado mañana me voy a Bilbao a ver a mi abuela y luego pasaremos por Cáceres, así que ya veremos si subo post desde allí o nos vemos a la vuelta. ¡Un beso!
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